IMPLEMENTACIÓN DEL BANCO DE GERMOPLASMA

Desde finales de marzo de 2015, el proyecto está a cargo de Pilar Gonzales, docente de la Institución, debido al fallecimiento de su precursor Laureano Martínez, sin embargo, el trabajo continúa con más personas a cargo, entre ellas PhD’s y estudiantes de tres distintas carreras del CEYSA, Salache y de la extensión La Maná.

Los estudiantes del quinto ciclo en Medio Ambiente, fueron los primeros en colaborar con dos objetivos de la investigación, la delimitación de parcelas y recolección e identificación de especies arbóreas y arbustivas. Ellos reciben la asignatura de manejo y conservación de ecosistemas por lo que a más de colaborar pudieron observar y diagnosticar el entorno. También se encuentran dos estudiantes para las pasantías y tres como ejecución de tesis

El grupo de 38 estudiantes fue dividido en tres para ser distribuidos en los transeptos  5, 6 y 7, ubicados en la parroquia La Esperanza. Cada agrupación se dirigió a su designio  mientras efectuaban sus labores pudieron observar la invasión de especies no autóctonas y deforestación constante que estaría provocando una erosión a corto plazo.

Existen alrededor de siete transeptos, la mayoría se encuentran en las colinas de bosque, subir a ellos no es nada sencillo, por lo que es necesario viajar con los implementos necesarios, un par de botas en primer lugar, un kit de campamento, alimentos en enlatados o de fácil preparación y lo más importante abundante líquido ya que la transpiración y deshidratación a causa del clima y esfuerzo al subir son inevitables.

Para la coordinadora general es un proyecto muy interesante y que a pesar de que los objetivos son sumamente grandes se puede trabajar con ellos, siempre y cuando exista el apoyo de varios especialistas al igual que el financiamiento.

Tanto estudiantes como docentes sienten un enorme compromiso con la naturaleza, el problema se ha identificado a tiempo y es posible una recuperación de varias especies autóctonas. Con la implementación del banco de Germoplasma, la desaparición de las plantas es imposible, se podrá realizar una reinserción o reforestación adecuada  impidiendo se cree una destrucción del medio ambiente.

Es una gran ventaja tener un banco de germoplasma y será de impacto no solo provincial sino a nivel nacional, es importante porque de esa manera no solo se afirma la supervivencia de las especies animales o vegetales sino la del ser humano.

En otros países las semillas copan las estanterías de almacenamiento sin siquiera poseer una gran biodiversidad como la nuestra, incluso, son dueños de especies de todo el mundo, lo que significa que ostentar un banco germoplásmico no es una emergencia sino una obligatoriedad.

Lo ventajoso en esta experiencia según el PhD, Carlos Torres, fue que los estudiantes interactuaron, comprendiendo la realidad  social  y ambiental, creando consciencia en ellos, que el conocimiento no sea solo teórico sino practico y que creen soluciones para evitar desastres en la naturaleza.

Objetivo por objetivo será el propósito de los encargados, hasta lograr un buen posicionamiento real de las actividades, los cuales serán presentados hasta el mes de diciembre, donde se culmina el plazo propuesto del proyecto, no obstante surgirá una nueva petición de financiamiento para llevar a cabo las propuestas de cambio en la zona noroccidental de La Maná.